Fontellas es una pequeña aldea situada en la Val de Ayerbe a cuyo municipio pertenece. Está citada documentalmente a partir de 1083. Su arquitectura se situa en el siglo XVIII. Su conjunto urbano alberga el templo parroquial dedicado a Santa Ana que fue reedificado en el año 1.898 a expensas del Obispo de Huesca Doctor Supervía.

Da la bienvenida a la población una cruz de término que al igual que su fuente-lavadero se datan en el s. XVIII.

Es un pueblo prácticamente abandonado, cuyas tierras son cultivadas por los antiguos habitantes desde sus nuevos asentamientos.

El trazado urbano es de gran simplicidad, dada su reducida extensión y el bajo número de habitantes que en él hubo.Se reduce al camino de acceso en el que se levantó alguna edificación  y una calle transversal a este camino. También hay una plaza que conecta con esta calle y completa el trazado. El conjunto, aunque presenta un aspecto descuidado como consecuencia del abandono, resulta de interés por su homogeneidad y el estado original que presentan las edificaciones, fruto no intencionado de la emigración.

A la entrada del pueblo hay una fuente, de las cobijadas bajo arco en muro de sillares que se completa con un abrevadero y un lavadero. Puede ser obra del siglo XVIII