ERMITA DE NUESTRA SEÑORA DE LA GARGANTA

Está situada al suroeste del pueblo. Es un edificio adosado a las paredes del cementerio. La fábrica es de sillarejo y tapial. El edificio es de una nave de tramo cubierto con bóveda de sección de arco deprimido rectilíneo que queda indiferenciada con el revestimiento de las paredes. La capilla mayor está cubierta con lunetos sobre planta poligonal y la sacristía con forjado de maderos vistos. Hay un coro a los pies, en alto, sobre bóveda plana. El frente se apoya sobre tres arcos rebajados, sobre columnas lisas sin capitel. Los vanos son pequeños, de arco rebajado, y hay dos en cada lado y uno en la fachada, que al exterior es adintelado.

El muro de los pies constituye la fachada del edificio, que está rematada por piñón escalonado con espadaña adintelada de ladrilllo  en lo alto. La puerta es adintelada de dovelas de piedra y tiene un portón viejo claveteado. El tejado queda volado sobre cornisa de doble fila de ladrillo.

La construcción carece de un estilo definido y aparenta ser de medidados del pasado siglo. El reteblo es neogótico moderno. Hay una imagen de la "Inmaculada" vestida.

Los vecinos de Ortilla acuden a esta ermita el segundo día de sus fiestas patronales, en honor a su patrón San Gil, que se celebran el 1 de septiembre. Antiguamente, se iba desde la iglesia parroquial hasta la ermita en procesión, y durante el recorrido de ida y vuelta se volteaban las campanas.