Los Mallos de Riglos, según la leyenda, fueron levantados por una hilandera mágicamente para protegerse tras ellos. Esta "filadera" lleva bajo su brazo una enorme rueca y teje el lino en el río Gállego.
" Brujas, demonios, encantarias y seres mágicos"
J.A. Adell-C. García
Ed. Pirineo